viernes, 29 de octubre de 2010

¿Metido, lambón, sapo o lagarto?

Metido, lambón, sapo o lagarto.

¿Que es lo que hace que algunas personas se hagan acreedoras a uno de estos cuatro adjetivos tan poco agradables?

Sin lugar a dudas es la condición humana! Es decir, por el solo hecho de pertenecer a la especie "Homo Sapiens" surge el ingrediente mágico para que andemos metidos en lo que no nos importa o en lo que no es de nuestra incumbencia.

Sería desafortunado sindicar de esta particular característica solo a la mujer, cuando el hombre la iguala y en ocasiones la aventaja significatívamente en el oficio de andar metidos en lo que no les importa. Hay que reconocer que la mujer es súmamente elocuente de palabra (y aclaro que no se puede ser elocuente, en otra cosa, porque la elocuencia trata de la capacidad de expresarse públicamente, de forma fluida, elegante y persuasiva), pero esa habilidad no necesáriamente es diréctamente proporcional a la capacidad de andar metidas en las cosas ajenas. Definitívamente el oficio es sábiamente compartido entre hombres y mujeres.
Sucede y pasa que la mayoría de nosotros los seres humanos (hombres y mujeres), encontramos cierto gusto, cierto morbo, cierto placer, cierta satisfacción, al conocer y curiosear situaciones ajenas a nosotros, pero eso si, propias de nuestro propio entorno, especialmente si estas situaciones son comprometedoras o de algún modo cuentan o tienen eses tinte o ese carácter prohibitivo de parte de la sociedad.
El sexo y las relaciones de pareja aportan buena parte del material preferido por los dedicados a andar metidos en lo que no les incumbee, así es que entre tantos dichos, decires y diretes, tenemos que:
-"La vecina tiene amante";
-"El vecino le hace el mantenimiento a la fulana del quinto";
-"La del cuarto come a la carta."
-"El jefe sale con la secretaria";
-"El doctor con la enfermera";
-"La hija del vecino con el portero";
-"La del salón de belleza con el policía";
-"El vigilante con la aseadora"
-"Al de personal hay que saludarlo saltando o con el rabo contra la pared";
-"El gerente atiende a las tres, incluida su esposa"
...y así muchas otras frases que lanzadas al viento con ese toque periodistico que todos tenemos, suelen llamar la atención de un público nada desprevenido para estos tópicos.
Como el sexo es una actividad de temprana iniciación hoy en día, algunos miembros de la comunidad académica (profesores, estudiantes, colegiales, prepas o universidad), marcan la pauta para estar en el ojo de los observadores para que estos últimos puedan ejercer su noble oficio. Allí encontramos:
-"¿Y como cree que el tipo la pasó?"
-"El profe tiene buen gusto"
-"A esa pobre no lo quedaba otra cosa que aflojarlo"
-"La teacher es una asaltacunas"
-"La profe no los deja ni graduar y los pone a ejercer"
-"Si eso paga por apuntes, que dará por el examen"
-"La dejaron copiar porque trajo minifalda"
-"Consiguió los puntos porque es muy cariñosa"
-"Si no se sacrifica, no se gradua mijita!"
-"Solo son dos saliditas a bailar y asunto arreglado"
-"En la biblioteca aprende, en el motel pasa"
-"Baje el escote y suba la nota pendeja"
Pero sería sumamente injusto relacionar la actividad de lambonería solo con la actividad sexual o con el fuero personal del individuo. Tambien hay actividades que ocupan a los lambones y que denotan ciertas habilidades para relacionarse con los semejantes de su entorno, como:
-"El de compras le pide coima a todo el mundo"
-"Sin propina no lo atienden"
-"Unos pesos y el hombre se hace el que no ve"
-"Llévele un presente y el tipo le consigue el cupo"
-"Unos pesos más y le dan la licencia sin problema"
-"Pórtese bien y verá que el inspector no la jode"
-"Salga de un billete y se libra de esa visita molesta"
-"Mijita, sea amable con el jefe y verá que el ascenso es suyo"
-"Una mordidita y verá que no le remolcan el carro"
El caso es que todas las anterires situaciones son las que mantienen ocupados a nuestros personajes que deben hacer la dura tarea de...
Metidos, lambones, sapos o lagartos!